- Este avance se enmarca dentro del convenio de colaboración suscrito por ambas entidades para el fomento de la detección y atención temprana en el ámbito asistencial
- Diseñado por dos logopedas de la Fundación Española de la Tartamudez, ayudará a los pediatras a tomar decisiones de manera sencilla y clara
- El proyecto contempla, además, la puesta en marcha de un estudio prospectivo para evaluar la eficacia del tratamiento, así como la incidencia real de la tartamudez
Fundación Vithas y Fundación Española de la Tartamudez han presentado un algoritmo que permite simplificar el proceso de evaluación del habla llevado a cabo por el pediatra en consulta, favoreciendo el diagnóstico precoz y la atención temprana del niño con disfluencias. Dicho algoritmo se enmarca dentro del convenio de colaboración suscrito por ambas entidades el pasado año, con el propósito de avanzar en el ámbito asistencial en la obtención de un diagnóstico temprano de la tartamudez y su posterior tratamiento. Para ello, el convenio fomenta el desarrollo de una política de detección precoz de la tartamudez en consulta, la cual resulta ampliamente exitosa si se realiza entre los 2 y los 6 años de edad.
El Dr. Ángel Ayuso, director científico corporativo de Vithas y director gerente de Fundación Vithas, afirma que “desde la Fundación Vithas estamos convencidos que sólo a través del apoyo a la investigación podremos avanzar en la mejora de diagnósticos y el desarrollo de nuevos tratamientos que ayuden a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos en general”. Además, asegura que la detección de la tartamudez en consulta de pediatría a través de protocolos unificados en toda la geografía nacional “permitirá tener una fotografía real de la incidencia de la tartamudez infantil, trasladando principios de equidad al diagnóstico precoz y tratamiento”.
Algoritmo pionero en España
El algoritmo, diseñado por Raquel Escobar y Manuela Torres, logopedas de la Fundación Española de la Tartamudez, ha tenido en cuenta la dificultad que implica para el pediatra elaborar una evaluación exhaustiva del habla y la necesidad de tiempo para ello. “Se trata de algo novedoso, pues en la actualidad no existe en España ninguna herramienta similar relacionada con la tartamudez. Su implantación permitirá simplificar la toma de decisiones y evitar la disparidad entre profesionales y Comunidades Autónomas, agilizando la detección precoz y por tanto la atención temprana”, asegura Yolanda Sala, vicepresidenta de la Fundación Española de la Tartamudez.
Para su elaboración se han tenido en cuenta principalmente factores de riesgo como los antecedentes familiares o la edad de inicio, siendo especialmente importante si esta es superior a los 5 años. Además, establece unos signos de alerta para aquellos casos en los que no haya presencia evidente de factores de riesgo, por ejemplo: que las disfluencias tengan una duración superior a los tres meses desde su aparición, que existan repeticiones, bloqueos o prolongaciones, así como comportamientos secundarios de tipo fisiológico, verbal o emocional.
La implantación del algoritmo se llevará a cabo en las próximas semanas en los hospitales Vithas Madrid Pardo de Aravaca, Vithas Madrid La Milagrosa, Vithas Xanit Internacional, Vithas Málaga, Vithas Valencia 9 de Octubre y Vithas Castellón y será liderada y coordinada por el Dr. Javier Miranda, jefe del servicio de pediatría de Vithas Valencia y Castellón.
“La labor preventiva y de detección precoz del pediatra en los trastornos relacionados con la tartamudez es fundamental, ya que en muchas ocasiones es al pediatra a quien los padres consultan en primer lugar. Que los pediatras tengamos mejor conocimiento de todos los aspectos relacionados con la tartamudez mejorará el manejo que hagamos de la misma, y por tanto los resultados a medio y largo plazo”, afirma el Dr. Miranda.
Desarrollo de un estudio para evaluar la eficacia
Simultáneamente a la implantación del algoritmo de detección precoz, en diferentes hospitales Vithas se va a iniciar un estudio de seguimiento prospectivo para evaluar la eficacia del protocolo elaborado, la incidencia de los trastornos de fluidez y los resultados del tratamiento en los niños preescolares. Para ello, se llevará un registro de todos los niños controlados ambulatoriamente en consultas externas de pediatría que voluntariamente quieran participar. Posteriormente, se seguirá su evolución desde el primer año hasta los 5 años de edad.
El objetivo del estudio es analizar los antecedentes familiares y factores de riesgo, comprobando tanto el desarrollo del lenguaje como la aparición de disfluencias. “Conocer la incidencia real en nuestro medio, la evolución de los pacientes y los resultados del tratamiento especializado nos permitirán llevar a cabo un mejor manejo de estos niños y sus familias en nuestras consultas de pediatría”, asegura el Dr. Javier Miranda.